sábado, 4 de abril de 2020

TERCERA SEMANA DE CONFINAMIENTO


No se nos quita el miedo, primero a no infectarnos por el virus en el momento actual, pero también a qué pasará cuando salgamos y tomemos conciencia de todo lo que se ha llevado por delante esta pandemia : sueños, proyectos, seres queridos de los que no sabemos como han sido sus últimos momentos, amistades de las que no hemos podido despedirnos y la soledad de sus familiares y de sus vecinos…

El virus no solo ha atacado todas nuestras emociones sino que nos ha dejado ante un gran abismo que no sabemos como vamos a superar.

En estos días de confinamiento he conocido a la violinista que todas las tardes a las siete sale a deleitarnos con varias piezas a,la señora que riega las flores y que ha puesto mas tiestos aunque a las 8 de la tarde no sale a aplaudir,  a las jóvenes que toman el sol con sus aperitivo y que te acompañan con los aplausos, cantando el Resistiré y nos saludamos como si nos conociéramos de siempre, a la familia en la que solo sale aplaudir el varón,o el que lo hace con las ventanas medio cerradas por miedo o vergüenza, en esto se resume ahora nuestra vida .

Pero están surgiendo otras iniciativas que nos suben el animo: jóvenes que pertenecen a movimientos sociales del barrio y que han organizado con los servicios sociales del distrito, la atención a familias que han sido atacadas por los despidos, la enfermedad, las deudas y los miedos,  no solo a la situación actual, sino al porvenir que se avecina. Estas familias que están en situación tan precaria y vulnerable van a recibir unas ayudas de comida,limpieza o alimentos y necesidades para los bebes, de estos jóvenes que han hecho una aportación económica y se comprometen a repartir a sus domicilios lo que necesitan

También los mercados y tiendas del barrio están recogiendo los pedidos telefónicos y repartiendo  alimentos y productos de limpieza al vecindario que es de riesgo y no deben salir.

Estas iniciativas y muchas más que no conocemos porque no salimos, nos dan una gran esperanza de que el mundo es más solidario de lo que creemos y que nuestra población joven se desvive por todo lo que necesitamos.

Otro mundo es posible y tenemos que hacer entre todas y todos que sea una realidad, no dar lo que nos sobra sino compartir lo que tenemos.

Enviamos el enlace de este grupo de ayuda y cuidados, con esta iniciativa  nos han demostrado que cuando son necesarios ahí están, jugándose la vida, su comodidad, su descanso…luchando por su barrio y sus vecinos sin distinción de edades,solo valorando sus necesidades.
Solo puedo dar las gracias!!!





Katy (4 de abril de 2020)

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Tu opinión nos interesa. ¡Gracias por comentar!