jueves, 19 de abril de 2018

Operación Chamartín



El pasado 24 de julio se hizo público un acuerdo que, según los firmantes, «desbloquea» la Operación Chamartín, que se ha bautizado como Madrid Nuevo Norte y que está generando intensos debates. Como votante de Ahora Madrid, me gustaría compartir textos, declaraciones y también mis propias reflexiones sobre este tema de vital importancia para Madrid.

PROGRAMA ELECTORAL DE AHORA MADRID

Somos muchas las que participamos en la campaña electoral de Ahora Madrid y que apostábamos y apostamos por un cambio de modelo.
En el programa se hacía un análisis muy acertado de las últimas décadas y la fotografía era desoladora: una ciudad endeudada, al servicio de negocios privados, una ciudad dura, hostil, donde campaban a sus anchas la especulación, las recalificaciones, los pelotazos y las obras faraónicas; con megacontratos para amiguetes, clientelismo, corrupción, rapiña de lo público, burbujas inmobiliarias, predominio del automóvil, contaminación…; una ciudad con políticas impuestas desde arriba y sin ninguna participación ciudadana real:
«El sistema económico que han desarrollado los gobiernos municipales hasta el momento ha sido profundamente ineficaz, injusto e insostenible, y basado en las grandes promociones urbanísticas»

Área 1: (Economía sostenible y empleo de calidad)
Se hacía hincapié en las enormes desigualdades que se dan en la población: «Madrid es la segunda ciudad más desigual de Europa después de Atenas. El norte es la zona rica y privilegiada: universidades, hospitales, centros de negocio, viviendas de alto standing…, mientras que en el sur se concentran las industrias contaminantes, incineradoras, basureros… y las viviendas más humildes».
Después de este diagnóstico venían las propuestas, entre muchas otras:
Área 3 (Derechos sociales e inclusión social): Se habla de garantizar el derecho a una vivienda digna, renunciar a obras innecesarias, priorizar la rehabilitación y el alquiler, y acabar con las viviendas vacías.
Área 4 (Ciudad cercana, cohesionada y habitable): Se habla de paralizar y revertir prácticas urbanas que atienden a intereses particulares sin mirar el bien común. Se abrirán procesos de participación con técnicos, expertos, políticos, vecinos y asociaciones. Se habilitarán mecanismos de control, transparencia y participación en la gestión urbanística. Se buscará el reequilibrio y la cohesión territorial. Se pondrán en práctica políticas de ecología urbana, de respeto al medioambiente y se habilitarán mecanismos de control, transparencia y participación en la gestión urbanística.

La segunda parte del programa habla de los distintos barrios; en Chamartín se propone de forma clara y rotunda paralizar la operación planeada, auditar los acuerdos existentes y promover un proceso participativo abierto.
Desde mi punto de vista, el caso de la Estación de Chamartín y de toda la zona es el ejemplo más claro de la política del PP en nuestra ciudad y cumple,uno por uno, todos los rasgos negativos del diagnóstico que aparecen en el programa electoral, y aunque las propuestas son muy generales y se quedan muchas veces en una declaración de intenciones, el caso Chamartín es tan llamativo y paradigmático que es en el único barrio en el que se habla claramente de echar abajo un proyecto anterior.

PACTO CONTRA LA ESPECULACIÓN Y POR EL DERECHO A LA CIUDAD (21 de ABRIL 2015)

Este pacto fue firmado antes de las elecciones por numerosas asociaciones vecinales y ciudadanas y por tres grupos políticos: Partido Socialista,Izquierda Unida y Ahora Madrid. 
Creo que es fundamental leerlo para entender las críticas y la oposición a Madrid Nuevo Norte.

https://madridciudadaniaypatrimonio.org/blog/pacto-contra-la-especulacion-urbanistica-en-madrid



OPERACIÓN CHAMARTíN
HISTORIA: PERSONAJES, CIFRAS Y LETRAS

1991: Surge el proyecto. Felipe González es presidente del gobierno, Agustín Rodríguez Sahagún es el alcalde de la capital y Joaquín Leguina, el presidente de la Comunidad.
1993: Renfe, en aquel momento dependiente del Ministerio de Fomento (Josep Borrell), adjudica a Argentaria (hoy BBVA) el desarrollo urbanístico de la zona. Durante años los propietarios de los terrenos expropiados han pleiteado para recuperar sus derechos, argumentando, con razón, que Renfe había cambiado el uso público de los mismos, pero al final perdieron ante el Tribunal Supremo, aunque siguen litigando y han llevado el caso hasta los tribunales europeos. Están organizados en la Plataforma No Abuso.
2004: Justo el día de los atentados, el 11 de marzo, estaba prevista en Madrid la aprobación de la operación, que queda paralizada tras la sorpresiva llegada al poder de José Luis Rodríguez Zapatero.
2008: Acuerdo parcial entre el gobierno socialista, el Ayuntamiento, el consorcio Distrito Castellana Norte DCN (sociedad formada por BBVA y Constructora San José) y ADIF,que necesita esta operación para reducir su enorme deuda contraída por la construcción de las líneas del AVE.
El proyecto comprendía la actuación sobre 3,3 hectáreas,la construcción de 17.000 viviendas y otros equipamientos, e incluía otras obras accesorias como soterrar gran parte de las vías con toneladas de hormigón y el derribo de las cocheras de la EMT y del depósito de agua del Canal de Isabel II.
Pero este año estalla la burbuja inmobiliaria y el proyecto vuelve a paralizarse.
Durante todos estos años ha habido una oposición frontal al plan tanto por parte de asociaciones vecinales, como de ecologistas, urbanistas, etc.
2015: A principios de este año se da luz verde al plan, con Ana Pastor en el Ministerio de Fomento, Salvador Victoria en el Canal de Isabel II, Ignacio González en la Comunidad de Madrid y Esperanza Aguirre en el Ayuntamiento. Pero no llegan a tiempo,  Ahora Madrid gana las elecciones municipales con un programa en el que se comprometía a un nuevo modelo de urbanismo y a la paralización de esta operación, y se vuelve a la casilla de salida.
Realmente el proyecto parece gafado.
Me voy a permitir usar un símil taurino para explicarlas las posturas de los distintos partidos políticos:
Durante décadas,«toreros» de la derecha ven con desesperación cómo en plazas de provincia se torean «grandes corridas» (pelotazos y especulación inmobiliaria): la Expo de Sevilla, las Olimpiadas de Barcelona, megaplanes urbanísticos en Valencia, Palma y tantas otras, mientras que en la capital de España ellos son incapaces de rematar la faena.
Para una vez que la izquierda (Ahora Madrid), logra «torear» en una gran plaza, le toca lidiar con esta operación, que es como un mihura,y que con sus cornadas amenaza con llevársela por delante. Otro de los morlacos que le ha tocado en suerte es Madrid Destino.
El PSOE, durante todos estos años, ha oscilado entre salir al ruedo aprobando y fomentando la operación, o esconderse en el burladero y esperar a que el toro pille a otros.


2016: Ahora Madrid, tal y como había prometido en su campaña electoral, paraliza la operación y abre una Mesa Social de análisis y negociación con todas las partes implicadas: Ministerio de Fomento, DCN, Ayuntamiento, organizaciones vecinales, partidos políticos, ecologistas… con dos objetivos: una auditoria del proyecto y la búsqueda de alternativas razonables a los problemas de esta zona de Madrid.

El resultado fue Madrid Puerta Norte, que rebajaba la superficie del proyecto  a 1,7 hectáreas, con 4.600 viviendas construidas, renunciando a las obras accesorias, millonarias, innecesarias e inadmisibles desde el punto de vista económico y ecológico.
El Ministerio de Fomento «exige una reflexión» al Ayuntamiento. Ni a Adif ni al consorcio DCN «les salen las cuentas», Manuela Carmena les contesta el 7 de junio de 2016 en El País en un artículo titulado: «Construyamos el futuro», un texto valiente,firme y durísimo denunciando los errores del pasado y defendiendo el nuevo proyecto.

EDUARDO MANGADA entrevista en Público (junio de 2016)

Con su estilo castizo y sin pelos en la lengua nos descubre los entresijos de la operación, que conoce de primera mano y nos da muchas claves para entender cómo actúa la política neoliberal en nuestras ciudades.


En el fondo se trata de una cuestión de principios y el Ayuntamiento es fiel a su programa: No se puede usar suelo público para especular y hacer negocios privados.
Pero, como dice el refrán, la alegría dura poco en la casa del pobre, los poderes financieros no aceptan estos planteamientos y empiezan a enseñar las garras.
A partir de este momento, el Ministerio, Adif y DCN abandonan la Mesa, pero no están dispuestos a renunciar otra vez al pastel y buscan nuevas estrategias.

2017: Se paralizan las reuniones de la Mesa, pero no las amenazas, las presiones ni los chantajes. La lucha se desplaza de la Mesa a los despachos, desde el Ayuntamiento se empiezan a lanzar frases inquietantes como las de Luis Cueto:«El secreto de esta operación es que salgan los números», «hay que diseñar la oferta más atractiva de Europa de los próximos años», «hay que aprovechar la oportunidad del Brexit». Frases repetidas una y otra vez que recuerdan al cuento de La lechera y a la película de Bienvenido Mister Marshall, y que ya habíamos escuchado en Madrid en operaciones como Eurovegas, Plaza de España, la Ciudad de la Justicia…
No se convoca a la Mesa Social, pero se crea una Mesa paralela (política y técnica), a pesar de que la FRAVM insiste en acudir a las reuniones en representación del movimiento ciudadano; el Sr. Calvo, concejal de urbanismo, no lo acepta, argumentado que así será más operativa.

De repente, después de meses de rumores, en pleno verano, cuando se hacen siempre estas cosas, Manuela Carmena por el Ayuntamiento de Madrid, Íñigo de la Serna por el Ministerio de Fomento y Antonio Bejar por el consorcio DCN, firman el acuerdo bautizado como Madrid Nuevo Norte, en realidad de nuevo no tiene nada porque se parece bastante al proyecto primitivo, muy poco al que salió de la Mesa Social y mucho menos al programa con el que Ahora Madrid se presentó a las elecciones.

Madrid Nuevo Norte se desarrollará en un total de 2,7 hectáreas, donde se edificaran 11.000 viviendas,(de las que solo el 20 % serán de uso público). 1,5  hectáreas se destinarán a uso terciario para construir un gran centro de negocios que pretende atraer a grandes empresas financieras.

El Ayuntamiento mantiene el control sobre la parte Norte del proyecto, pero el precio que tendrán que pagar es el aumento de la edificabilidad de uso terciario, que aumenta en un 13% la primitiva propuesta de DCN.

Hay que tener en cuenta que en Madrid, además de viviendas vacías, hay también un gran número de oficinas sin ocupar, muchas de ellas en esta zona de la Castellana, que ya cuentan con infraestructuras que podrían aprovecharse, sin contar con la gran cantidad de suelo libre y equipamientos en la zona sur.

Con ser grave, lo peor del proyecto no es tanto el aumento del número de viviendas, más del doble, ni que solo el 20 % sean públicas, cuando en otros PAUS de la zona es el 40 %,sino el uso terciario, ese gran centro financiero con sus grandes torres que esperan se llenen de inversores extranjeros, y la insistencia en las carísimas y antiecológicas obras «accesorias». La gran losa de hormigón sobre las vías computa como zona verde y libera más suelo edificable, pero no se dice que es de «mentira», no es suelo real, no se pueden plantar árboles (solo césped y arbustos), exige un mantenimiento costoso y mucha más agua que un suelo de verdad; desde luego esta no es la zona verde y los parques que llevan años pidiendo los vecinos de la zona. En cuanto a las cocheras y al depósito de agua, no se entiende por qué hay que desmantelar y trasladar algo que funciona.
Este proyecto aumentará los problemas de movilidad y contaminación de la zona, no contempla la actuación sobre los barrios, algunos de ellos con graves problemas y deficiencias, y tampoco se contempla la actuación ferroviaria para cerrar el «anillo» de la red de cercanías.
En el fondo se sigue con la política de usar el suelo público para usos privados y especulativos sin tener en cuenta las necesidades de la población.
También es preocupante que el acuerdo se haya aprobado entre bambalinas, incumpliendo los acuerdos de la Mesa, renunciando a su propio proyecto (Madrid Puerta Norte) y dejando de lado a las asociaciones vecinales y ciudadanas.
Vecinos, pequeños propietarios, ecologistas, urbanistas, algunos partidos y una pequeña parte de Ahora Madrid se han manifestado en contra del proyecto, al principio con un lenguaje moderado, confiando en poder tener margen de maniobra para cambiar el proyecto, pero pasado el verano, según se han ido conociendo más detalles, ha subido el tono de las críticas, se han enconado las posturas y ha aumentado la oposición al plan.
Por otra parte, son tantos los recursos, los procesos burocráticos, los estudios ambientales,los planes parciales, etc. que es muy posible que el proyecto siga paralizado durante mucho tiempo.

Por desgracia, ni el Ayuntamiento ni Ahora Madrid han informado seriamente y en profundidad de las características y el alcance del Plan, limitándose al comunicado oficial y a la foto que escenifica el acuerdo, en el que por cierto no aparece la Comunidad, ni Cristina Cifuentes.

OTROS MODELOS
Estamos acostumbradas a que nos digan que en política hay que ser realistas y no ser ingenuas, que cuando se gobierna hay que tomar decisiones incómodas, pero me parece que este proyecto se salta todas las líneas rojas, que es el ejemplo más claro del urbanismo neoliberal que denunciamos en la elecciones y que podemos fijarnos en modelos menos salvajes y agresivos.
Me gustaría hablar de ciudades sostenibles, de decrecimiento, de arquitectura de los cuidados, de urbanismo feminista…
https://www.elsaltodiario.com/tribuna/ciudad-feminista-inclusiva-ciudad-exclusiva-madrid-nuevo-norte-operacion-chamartin

Pero para que no me tachéis de utópica e idealista voy a poner dos ejemplos, uno en Berlín y otro en Madrid, para demostrar que se pueden hacer proyectos dentro de una ciudad capitalista, pero sin seguir los modelos tan ultraliberales y especulativos como los que caracterizan a la burbuja inmobiliaria española.


BERLÍN (AEROPUERTO DE TEMPELHOF)
En 2008 se cierra este emblemático aeropuerto, que en su momento fue el más grande del mundo. Es el que hemos podido ver en
numerosas películas de la época del nazismo y de la guerra fría; 380 hectáreas vacías,situadas en plena ciudad, bocado muy apetitoso para bancos y empresas inmobiliarias.
El famoso y «enrollado» alcalde Klaus Wowereit (el autor de la frase: «Berlín es pobre pero sexy») propone urbanizar parte del terreno,argumentando que cada año llegaban a Berlín 50.000 nuevos habitantes. El proyecto contempla 4.700 viviendas, oficinas para 7.000 trabajadores, centros comerciales, deportivos, bibliotecas… pero solo en los márgenes, reservando en el centro nada menos que 230 hectáreas para zona verde.
Pero este proyecto tan moderado(por favor, comparad las cifras con las de Chamartín), tropieza con la oposición de los vecinos que lo consideran un ataque frontal a la democracia, a la historia y a la ecología,y promueven un referéndum con el lema: «100 Prozent Tempelhofer Feld» (Tempelhof 100 % campo). Como podemos ver, hay naciones y ciudades que deciden las cosas importantes por referéndum, qué envidia.
Después de una campaña rápida y ejemplar, el 64 % de los berlineses deciden que el aeropuerto se quede como está temiendo, seguramente con razón, que una vez que entrasen las excavadoras que ya rodeaban las pistas, no habría forma de hacerlas salir. En cuanto a la necesidad de viviendas, proponen la rehabilitación de las existentes en Berlín y construir en terrenos que ya tengan infraestructuras, por ser esta solución mucho más barata y ecológica. Hacen mucho hincapié en que los terrenos son públicos, pertenecen a la ciudad y no es lógico dejarlos en manos de empresas privadas.
La zona vuelve así a sus orígenes, ya que a finales del XIX y principios del XX, antes de la construcción del aeropuerto, era un lugar muy apreciado por los berlineses para practicar deportes y disfrutar del tiempo libre.
Ahora es un espacio increíble, se ha conservado y rehabilitado el edificio de la terminal (que en estos últimos años se ha usado, entre otras cosas, para la acogida de refugiados). En las pistas se hacen con libertad todo tipo de actividades:  bicicletas,  cometas, footing, kiterolling, huertos urbanos, zona para perros, barbacoas, zonas de protección y observatorio de aves…
Cada vez que paseo por Tempelhof prefiero disfrutarlo y no compararlo con nuestra ciudad, lo que me provoca envidia, rabia y tristeza a partes iguales.



MADRID (SEDE DE REPSOL)

Parece que en un principio el edificio corporativo de Repsol iba a ser  una de las cuatro grandes torres al final de la Castellana. Los atentados del 11 de septiembre en Nueva York provocaron que muchos directivos y empleados no vieran con buenos ojos trabajar en un «rascacielos» y se buscan otras alternativas.

Se hace a medida y después de un proceso de consulta a los usuarios. Su finalidad siempre fue ser la sede de la compañía y no vender y revender los edificios buscando plusvalías especulativas.

Al final, la sede de Repsol se construye en la Zona de Méndez Álvaro, en una zona de tradición industrial que ya contaba con las infraestructuras necesarias, muy bien comunicadas por Metro, autobús y estación de Atocha(AVE). Esta actuación es un ejemplo de que el sur también existe, de que hay más estaciones que Chamartín y también de que viviendas y edificios industriales y empresariales pueden convivir en un entorno mixto y más humano. 
Muchas veces me he preguntado por qué nadie habla de la" herida y fragmentación que supone la estación y las vías de Atocha. Supongo que, aquí, en el sur de Madrid, el suelo era más barato y también es una zona con yacimientos arqueológicos protegidos que dificultan la rentabilidad y la especulación.
La sede de Repsol rompe también con el modelo de grandes torres y construcción en altura, son cuatro edificios con un máximo de cinco alturas en torno a un patio-jardín central con plantas autóctonas de fácil mantenimiento, pensado para facilitar el encuentro y la comunicación de sus 4.000 empleados y para que estos puedan acceder de forma rápida y ecológica.
La construcción cumple cánones como sostenibilidad de la parcela, eficiencia de agua, energía y atmósfera, uso de materiales reciclados, uso de medios de transporte ecoeficientes, etc. Y ha recibido numerosos premios.
En resumen, se puede hacer un edificio humano, sin grandes alturas, fuera de la zona norte y respetando el medio ambiente.


Mientras leía y escribía este texto, visité una exposición y leí en ella una frase de Platón que me impactó; hablando en su libro La república de las ciudades griegas, dice: «Porque cada una de ellas es muchísimas ciudades… como mínimo dos, enemigas entre sí, la de los pobres y la de los ricos».
Tristemente, después de tantos siglos, esta frase puede seguir aplicándose a todas nuestras ciudades.


Isabel Sánchez Suárez
Madrid octubre de 2017


5 comentarios:

  1. Magnifico y esclarecedor articulo. Sólo me queda la duda de porque justo la Alcaldesa más sensible que hemos tenido hasta ahora, vende nuestra vida, nuestra salud, nuestro confort, nuestro aire ya bien tóxico a los mismos de siempre...que dejen entonces de contarnos más cuentos de igualdad y justicia y de invitarnos a recoger los papeles de las aceras...cuanta decepción, rabia y crispación. Gracias por este buen artículo cargado de razones y documentación.

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    1. Es la pregunta que yo me hacía continuamente al escribirlo y no entiendo porque el Ayuntamiento no da ninguna explicación que no sea el comunicado oficial que no convence a nadie.

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    2. Para eso se echó a Sánchez-Mato no? había que sacar esto adelante. Algún día sabremos a quien se ha presionado y quien se ha beneficiado

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  2. Enhorabuena Isabel por este trabajo tan bien documentado y razonado. Ojalá empecemos seriamente a exigir que se cumplan los programas electorales y que la participación ciudadana sea realmente respetada.

    Creo que Ahora Madrid tiene que empezar a dar cuentas de su maLA GESTIÓN.

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    1. Y tampoco sabemos informar de las cosas que se están haciendo bien; está claro que no es nada fácil gobernar con una oposición como la del PP, con un "socio" como el PSOE y con las distintas tendencias que hay en Ahora Madrid, por eso no entiendo como han podido firmar este acuerdo y meterse en semejante berenjenal.

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