COMUNICADO DE LA FRAVM SOBRE LA APERTURA DE LAS TERRAZAS

POSICIÓN DE LA FRAVM RESPECTO DE LA APERTURA DE TERRAZAS DE HOSTELERÍA EN LA FASE 1 DE DESESCALADA CRISIS COVID-19

En las últimas semanas venimos asistiendo al debate sobre las condiciones de utilización del espacio público en las distintas fases de la desescalada de la crisis del COVID-19. Las especiales necesidades de distanciamiento físico para combatir la pandemia, deberían estar dirigidas a evitar un repunte de contagios, que nos podrían devolver a etapas tremendamente duras por las que hemos pasado durante el confinamiento domiciliario y por las que nadie querrá volver a pasar.

Entendemos que en una situación como la actual, el ayto debería haber reunido en una mesa conjunta de diálogo y negociación, como lo fue la Mesa del Ocio de la ciudad, a la FRAVM y al sector de la hostelería, para escuchar y trabajar conjuntamente en propuestas que favoreciesen la recuperación de la actividad económica, sin renunciar a los derechos de la ciudadanía, cumpliendo la legislación vigente y buscando salvaguardar la salud pública.

Por ello lamentamos que el ayto de Madrid haya preferido sentarse con el sector de la hostelería a escuchar sus demandas y, desde ellas, tomar decisiones sin haber escuchado, hasta la fecha, a la FRAVM. Para después convocar por distritos a algunas asociaciones vecinales para, al parecer, comunicarles las decisiones que se van a adoptar.

En vista de que estas reuniones se van a celebrar a partir de mañana miércoles 6 de mayo, hemos decidido trasladar a las asociaciones federadas los elementos que entendemos de consenso, para poder defender convenientemente los derechos de vecinas y vecinos en dichas reuniones. Hemos excluido de esta lista otras medidas que pueden ser válidas en unos barrios e inaceptables y/o inaplicables en otros. Al fin y al cabo, en una ciudad diversa como Madrid, no todo es valido o aplicable de manera uniforme.

Reiteramos que deseamos sinceramente que pronto puedan volver a abrir los negocios de hostelería y restauración. Sin embargo, las peticiones de Hostelería Madrid, para relajar las regulaciones del uso del espacio público para la instalación de terrazas, suponen perdidas de derechos para la ciudadanía que no podemos ni pasar por alto ni aceptar. Concretamente creemos importante defender:

• Se han de respetar todas las condiciones preexistentes en las Zonas de Protección Acústica Especial. En estas zonas está comprobado que se vulneran los niveles máximos de ruido regulados por ley, de ahí su protección, por lo que no se debería admitir ninguna medida que sea susceptible de incrementarlos. Igual que a nadie se le ocurriría autorizar una industria contaminante en una zona de bajas emisiones, no se puede hacer más ruido en una ZPAE.

• Los horarios actuales de las terrazas deben mantenerse para garantizar el derecho al descanso de vecinas y vecinos, con independencia de si la zona es ZPAE o no. Ampliar horarios supondría reducir el período de descanso del vecindario, ya bastante mermado. La reactivación económica de la ciudad no puede hacerse a costa de la salud de sus vecinas y vecinos.

• No estamos de acuerdo con la concesión de nuevas licencias de terrazas. Las medidas que adopte el ayto. deberían afectar exclusivamente a los establecimientos que ya disponían de autorización de terrazas con anterioridad a la crisis del COVID-19. La crisis no puede ser la excusa para que quienes antes no tenían licencia de terraza, por no cumplir condiciones, ahora sí la tengan al obviar las condiciones preexistentes.

• El aforo de los establecimientos y sus terrazas debe estar visible, así como las condiciones que han de cumplir según lo establecido para cada fase de desescalada. El % establecido por el Gobierno de estado debe aplicarse al aforo de la licencia anterior a la crisis COVID19 y no en función del espacio que se pretenda ampliar para cumplir con el resto de condiciones exigidas en los reales decretos.

• De ninguna manera es aceptable la ampliación de la superficie ocupada por las terrazas mediante la reducción del ancho de la acera a 1,5 metros, ni la instalación de mesas en la fachada de los establecimientos. Esas opciones no solo son contradictorias con la legislación de accesibilidad, sino con el necesario distanciamiento interpersonal al caminar, que exige como mínimo 3 metros de anchura de paso.

• Extender la temporada de terrazas durante todo el próximo otoño e invierno no es ambientalmente sostenible, pues vendría acompañada de sistemas de climatización de dichos espacios de terraza, en contradicción con la lucha contra el cambio climático que debe seguir siendo prioritaria para una ciudad que, sistemáticamente, incumple los límites de emisiones, tan perjudiciales para la salud.



Mayo 2020