miércoles, 25 de marzo de 2020

SEGUNDA SEMANA DE CONFINAMIENTO


Me pregunto si este confinamiento por el coronavirus en el que llevo 13 días, me está sirviendo para algo:

 - Por un lado, como va a ser largo, m
e estoy adaptando física y psicológicamente a esta nueva situación y voy reservando energías para un mes como poco.

 - Celebro y me uno a más gente, por ahora el virus no ha afectado a familiares y amigos mas cercanos y si alguno ha muerto nos protegemos diciendo que era mayor y no tendría posibilidades de sobrevivir en esta pandemia.

Hay situaciones que tengo constantemente en la mente:

- Las residencias de ancianos en las que se encuentran los mayores con miedos, soledad, aislamiento, desatendidos porque sus cuidadores han enfermado y nadie les levanta ni les da de comer y sus familiares no les pueden visitar para evitar propagación del virus. 
Personas que han pasado una guerra o una posguerra carente de todo y ahora están en la misma situación que vivieron hace años.
El dolor de las familias cuando ha muerto un ser querido y no pueden despedirse para no propagar el virus.

- Los hospitales abarrotados con enfermos tan graves que exigen toda la atención  y los recursos  y enfermedades antes leves, que ahora no se pueden atender por falta de capacidad.

- Profesionales con el temor a la infección , trabajando con un estrés terrible y rodeados de situaciones muy graves y pacientes que no tienen ninguna posibilidad.
Siempre se ha dicho que los médicos están preparados para salvar vidas y muy pocos para enfrentarse a la muerte.

Todo esto me plantea lo vulnerables que somos, creíamos tenerlo todo y ahora lo único que nos queda es la reflexión sobre nuestra vida y despedirnos de nuestros seres queridos porque tal vez no tengamos otra oportunidad.

Esta despedida, nos puede dar a tod@s la serenidad de que hemos sido capaces de estar acompañando a ese ser al que queremos y le hemos dicho lo importante que ha sido para nuestra vida o que frente al miedo me he sentido arropada.

Ahora si que estaremos a favor de la muerte digna,cuando esta vida no reúna las mínimas condiciones para ser vivida con dignidad, esta será una de las primeras cosas de las que tengamos que hablar cuando pase l
a epidemia.


Katy
25 de Marzo 2020


3 comentarios:

  1. Leo el artículo y estoy oyendo a Katy.
    Son unas píldoras de realidad, sin literatura, sin paños calientes,muy lejos de los consejos de autoayuda a veces bastante cursis que están inundando las redes.
    Habla de cosas que son muy duras pero que están ahí y hoy más que nunca: la enfermedad, la vejez,la muerte digna,las despedidas...
    Gracias Katy por tu mirada concisa y necesaria.
    Seguro que vendrán días mejores en los que veremos tu lado luminoso y tu risa que no para y en los que volveras a calzarte tu zapato veloz para enredar en calles y plazas

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    1. Gracias lectora,ya sabeis que no soy literata ni cuido las normas de escritura sino que expreso mis sentimientos desde lo mas profundo, unièndome a los sentimientos de la gente que me rodea,a sus miedos, sus tristezas ,esperando unas palabras para decir que yo también estoy asì. Sè que no estoy en el momento mas optimista pero observando la cruda realidad nos haremos fuertes y unidas a gente que ha estado viviendo esta situación antes y durante el virus ..y tal vez no tenga un mañana.
      RESISTENCIA Y REVOLUCION!!!!

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  2. Si, Katy RESISTENCIA Y REVOLUCION, Ni más ni menos o aprendemos de ésta o nos cargamos la civilización, como manera de vivir lo común. que bien lo expresas, como dice Isa concisa concreta,concisa, a la manera de los científicos y matemáticos, pero se te ve más allá, tienes ese más allá que las que te conocemos lo vemos, que todo es fruto de una profunda reflexión y de una experiencia muy vívida y vivida.Gracias por recordarnos las cosas importantes.

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